WASHINGTON.– El presidente Donald Trump firmó hoy una orden ejecutiva que extiende por otros 90 días la suspensión de los aranceles más elevados sobre productos provenientes de China, evitando así un incremento drástico que estaba previsto para entrar en vigor en las primeras horas del martes.
¿Qué implica esta extensión?
- La prórroga mantiene los aranceles actuales —que rondan el 30 % en la mayoría de los importes— congelando cualquier aumento hasta el 9 o 10 de noviembre, dependiendo de la fuente.
- China confirmó simultáneamente la extensión de su suspensión de aranceles adicionales sobre importaciones estadounidenses, alineándose con esta nueva tregua.
¿Qué buscamos con esta medida?
- La extensión tiene como objetivo evitar una escalada de aranceles que podría haber desembocado en un embargo comercial tácito, además de brindar más tiempo para avanzar en negociaciones más profundas .
- Las autoridades estadounidenses y chinas ya sostuvieron rondas de diálogo en Estocolmo, y los negociadores esperan reunirse nuevamente en unos tres meses.
- Se especula que este período podría allanar el camino para una posible cumbre entre Trump y el presidente Xi Jinping hacia finales de año.
Impacto en los mercados y sectores económicos
- La decisión generó una reacción positiva en los mercados globales, especialmente en Asia, donde índices como el Nikkei en Tokio y el ASX 200 en Australia registraron alzas.
- Para las empresas estadounidenses con relaciones comerciales con China, esta tregua representa una oportunidad para planificar operaciones a mediano y largo plazo con mayor certidumbre.
Qué sigue
Aunque esta extensión alivia las tensiones a corto plazo, persisten discrepancias profundas entre ambos países en temas sensibles como propiedad intelectual, subsidios industriales y el acceso a tecnologías estratégicas como chips y tierras raras.
El mundo económico observa con cautela si estas treguas temporales derivarán en un acuerdo más sólido o en nuevas fases de confrontación.
