La Secretaría de Relaciones Exteriores negó categóricamente que exista alguna petición formal del gobierno de Estados Unidos para extraditar a políticos mexicanos, como lo han sugerido versiones difundidas en medios y redes sociales.
En un breve comunicado, la Cancillería mexicana aclaró que, hasta este momento, no ha recibido ninguna solicitud oficial de extradición relacionada con funcionarios o exfuncionarios del país. La aclaración surge tras una serie de especulaciones que apuntaban a presuntas investigaciones abiertas en territorio estadounidense por delitos de corrupción o vínculos con el crimen organizado.
La SRE subrayó que cualquier proceso de extradición se realiza bajo procedimientos legales establecidos, los cuales requieren la intervención del Poder Judicial y la colaboración entre las fiscalías de ambos países. Además, recordó que las solicitudes deben cumplir con tratados internacionales y criterios judiciales específicos.
El desmentido se da en un contexto de alta sensibilidad política, a pocas semanas de las elecciones presidenciales mexicanas y en medio de un creciente escrutinio internacional sobre casos de corrupción en América Latina. No obstante, la Cancillería instó a no difundir información no verificada que pueda generar confusión o dañar la imagen de las instituciones.
Por ahora, la SRE reiteró su compromiso con la transparencia y la cooperación internacional en materia de justicia, pero recalcó que no hay ninguna solicitud activa desde Estados Unidos para extraditar a políticos mexicanos.
