La OTAN aumenta 5% su gasto en seguridad ante crecientes tensiones globales

BÉLGICA.- Los países miembros del bloque atlántico aprueban un incremento presupuestario histórico para fortalecer capacidades defensivas frente a amenazas como Rusia, China y el terrorismo internacional.

En una cumbre de alto nivel celebrada este martes en la sede central de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), los 32 países miembros acordaron por unanimidad incrementar en un 5% sus presupuestos destinados a seguridad y defensa a partir de 2026. Se trata de uno de los compromisos financieros más ambiciosos del bloque desde el final de la Guerra Fría.

La medida busca reforzar la capacidad colectiva de disuasión y respuesta militar ante el deterioro del contexto geopolítico mundial, en particular por la prolongada guerra en Ucrania, el aumento de la presión militar china en Asia-Pacífico y las amenazas híbridas como los ciberataques y la desinformación.

“Este incremento refleja la determinación de la OTAN de adaptarse a un mundo más peligroso y volátil. La seguridad ya no es opcional, es una inversión estratégica esencial”, declaró el secretario general de la organización, Jens Stoltenberg, al término de la sesión plenaria.

Compromiso más allá del 2%

Hasta ahora, los miembros de la OTAN se regían por el objetivo de destinar al menos el 2% de su Producto Interno Bruto (PIB) al gasto en defensa, una meta que solo 11 países habían alcanzado en 2023. El nuevo acuerdo establece que, además de cumplir con ese mínimo, cada país aumentará un 5% su presupuesto anual en términos reales, es decir, ajustado a la inflación.

El acuerdo incluye partidas específicas para modernización tecnológica, defensa antimisiles, capacidades de ciberdefensa, inteligencia artificial y movilidad militar rápida, así como el fortalecimiento de los flancos este y sur de la alianza, donde la presión rusa ha aumentado en los últimos meses.

Presión estadounidense y liderazgo europeo

Fuentes diplomáticas señalaron que la iniciativa fue impulsada por Estados Unidos, Reino Unido, Polonia y los países bálticos, pero también recibió el respaldo de potencias europeas como Francia y Alemania, que hasta ahora habían mostrado mayor cautela ante incrementos presupuestarios.

“Los europeos entendemos que debemos asumir más responsabilidad. La defensa de Europa no puede depender exclusivamente del compromiso estadounidense”, afirmó la ministra de Defensa alemana, Christine Lambrecht, tras firmar el acuerdo.

La medida también busca blindar la unidad de la OTAN en un contexto donde algunos candidatos presidenciales en EE. UU., incluyendo el expresidente Donald Trump, han cuestionado el valor de la alianza y amenazado con retirar el apoyo si otros países “no pagan su parte justa”.

El Kremlin reaccionó rápidamente al anuncio, calificándolo de una “escalada innecesaria” que profundiza la confrontación con Rusia. Desde Moscú, el portavoz del Ministerio de Exteriores advirtió que el incremento presupuestario será interpretado como una “provocación hostil” y que el gobierno ruso ajustará sus propios planes militares en consecuencia.

En contraste, Ucrania celebró la decisión y solicitó a la OTAN acelerar el suministro de armamento avanzado. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, elogió el compromiso y lo consideró “una señal clara de que Europa y sus aliados no permitirán una victoria del autoritarismo”.

Analistas advierten, sin embargo, que el cumplimiento efectivo del aumento podría enfrentar obstáculos políticos y fiscales en algunos países, especialmente en aquellos con economías debilitadas o con oposición interna al gasto militar.