El gobierno federal presentó hoy una Estrategia especial “Cero Robos” destinada a reducir el robo de vehículos y transporte de carga en tres corredores carreteros estratégicos: México–Puebla, México–Querétaro y Culiacán–Mazatlán.
Estrategia Balam y Operativo Río Frío (México–Puebla y Querétaro)
La Guardia Nacional, bajo el nombre de Operativo Balam, actúa desde octubre de 2024 en 13 tramos carreteros, logrando una reducción del 28 % en robo de vehículos y una recuperación del 24 % de unidades robadas.
En la autopista México–Puebla, que concentra el 29 % del robo a transporte de carga en el país, se lanzó el Operativo Río Frío, con 302 agentes, 141 vehículos, 22 drones y 3 aeronaves no tripuladas desplegados.
También se reportaron 38 accesos irregulares detectados en ese tramo, que serán clausurados mediante infraestructura como arcos dinámicos, torres de vigilancia y cierres físicos.
Plan Cero Robos en Culiacán–Mazatlán
Desde el 12 de julio, en la carretera Culiacán–Mazatlán se implementó el Plan Cero Robos, con un despliegue de 298 agentes, 2 helicópteros, 12 drones, 143 vehículos y personal de reacción especializado.

En solo 8 días se registraron solamente 3 robos (todos resueltos o frustrados), una disminución notable respecto a periodos anteriores. Asimismo, la estrategia fue diseñada a partir de diagnósticos realizados por autoridades y el gabinete federal el día anterior a su puesta en marcha.
Tres ejes estratégicos para el combate
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo informó que el plan “Cero Robos” se basa en tres líneas de acción clave: el Operativo Balam, el cierre de accesos clandestinos y la instalación de sistemas de videovigilancia y arcos tecnológicos conectados con la Guardia Nacional, a implementarse a partir de 2026.
Impacto y contexto
El robo a transportistas ha generado pérdidas estimadas en hasta 92 mil millones de pesos al año. Puebla, Querétaro y el Estado de México se encuentran entre los estados más afectados, sumando el 80 % de los casos en carreteras nacionales.
Gracias a la estrategia, se ha intensificado la coordinación con estados y municipios para cerrar “cachimbas” y accesos secundarios, además de realizar operativos en zonas de alto riesgo como la autopista México‑Puebla, el tramo Amozoc‑Perote y otros puntos críticos.