INDIANA.- El gobierno federal, en colaboración con el estado de Indiana, anunció la apertura de una nueva cárcel para inmigrantes indocumentados en el Miami Correctional Facility, que ampliará su capacidad con 1,000 nuevas camas bajo el nombre de “Speedway Slammer”. La iniciativa fue confirmada por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, quien resaltó que se trata de una alianza con las autoridades estatales para apoyar las deportaciones masivas ordenadas por la administración Trump.
Claves del plan
El gobernador Mike Braun firmó acuerdos bajo la sección 287(g) del Acta de Inmigración, en los que participan la Policía Estatal de Indiana, el Departamento de Seguridad Nacional del estado, el Departamento de Correcciones y la Guardia Nacional. Estas instituciones colaborarán con ICE en tareas como arrestos, detenciones y supervisión de inmigrantes. Hasta 1,000 camas adicionales estarán disponibles en el Miami Correctional Facility, y también se consideró el uso temporal de Camp Atterbury, operado por la Guardia Nacional.

“Speedway Slammer”: resonancia y respuesta
El nombre del centro hace referencia a la cultura automovilística del estado, inspirada en el famoso Indianápolis Motor Speedway. Noem explicó en redes sociales que esta cárcel recibirá a los “peores de los peores” migrantes. Sin embargo, el propio autódromo ha declarado públicamente que no autorizaron el uso de su imagen para identificar esta prisión.
Críticas y preocupaciones
Organizaciones de derechos civiles como la ACLU de Indiana han alertado sobre condiciones inhumanas en centros similares, además de señalar que muchos detenidos no tienen antecedentes criminales, incluidos menores. También se cuestiona la falta de transparencia sobre cómo se tratarán los detenidos y si habrán garantías legales.
Asimismo, representantes demócratas locales exigen acceso a información sobre el número de personas que serán alojadas y cómo se garantizarán sus derechos durante el proceso de deportación.