CIUDAD DE MÉXICO.- La planta prehispánica mexicana es reconocida por sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y su aporte en vitaminas y minerales que favorecen la salud hepática, renal y ósea.
El incremento de casos de hígado graso, o esteatosis hepática, ha impulsado la búsqueda de estrategias preventivas y alternativas naturales que ayuden a reducir sus riesgos y mejorar la salud metabólica. Este padecimiento, caracterizado por la acumulación excesiva de grasa en las células del hígado, suele estar relacionado con una alimentación poco saludable, el consumo elevado de calorías, el sobrepeso y enfermedades como la diabetes tipo 2.
Ante este panorama, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) destacó la importancia de rescatar plantas comestibles tradicionales que pueden complementar los tratamientos médicos bajo supervisión profesional. En su publicación “Nutrición con sabor”, la dependencia federal documenta los beneficios del huauzontle (Chenopodium nuttalliae), una planta prehispánica mexicana con alto valor nutritivo y propiedades medicinales.
Un alimento ancestral con grandes beneficios
El huauzontle, cuyo nombre proviene del náhuatl “huauhtzontli” —que significa “cabeza de amaranto” o “pequeño árbol”—, se cultiva principalmente en Guerrero, Morelos, Estado de México, Tlaxcala y Puebla, en zonas de clima seco y templado. De acuerdo con la SADER, toda la planta es comestible, desde los tallos hasta las ramas y hojas, y ha formado parte de la alimentación mexicana desde tiempos prehispánicos.
Entre sus principales propiedades nutricionales, el huauzontle contiene proteínas, hierro, calcio, fósforo y vitaminas A, B, C y E, que contribuyen al fortalecimiento del sistema inmunológico, estimulan la memoria y favorecen el buen funcionamiento cerebral.
Protege el hígado, los riñones y los huesos
La publicación de la SADER señala que el huauzontle actúa como antioxidante y antiinflamatorio, lo que le confiere un papel importante en la prevención del hígado graso, la artritis y enfermedades cardiovasculares. Además, su aporte en fibra, vitaminas y minerales ayuda a depurar el organismo y proteger la función renal.
Asimismo, su contenido de calcio y fósforo favorece la salud ósea, ayudando a prevenir la fragilidad y el deterioro estructural de los huesos. Estas cualidades han despertado el interés de investigadores y nutriólogos que buscan alternativas naturales para mejorar la nutrición y prevenir enfermedades crónicas.
De la milpa a la mesa
El huauzontle puede incorporarse fácilmente en la dieta cotidiana. Tradicionalmente se prepara en tortitas capeadas con salsa de tomate, aunque también puede incluirse en sopas, guisos, ensaladas o acompañado de huevo y queso, potenciando su valor nutritivo.
La SADER sugiere una receta sencilla para aprovechar sus beneficios: cocer los ramos de huauzontle, picarlos y mezclarlos con huevo y queso fresco para formar pequeñas tortitas, que se doran ligeramente en sartén y se sirven con salsa de tomate natural.
Saberes tradicionales para una salud moderna
El rescate del huauzontle y su revalorización como alimento funcional reflejan la importancia de los saberes tradicionales en la salud pública y la nutrición preventiva. Su inclusión en la serie editorial “Nutrición con sabor” reafirma el compromiso de la SADER con la promoción de dietas equilibradas, sostenibles y basadas en la riqueza biocultural de México.
“El huauzontle combate el hígado graso, limpia los riñones y fortalece los huesos. Es una muestra de cómo la naturaleza mexicana ofrece soluciones al bienestar humano”, señala la dependencia federal.