El municipio de Cuautla, en Morelos, fue intervenido por fuerzas federales y estatales tras el aumento de hechos violentos en la región. A partir de esta semana, el control de la seguridad pública quedó a cargo del Ejército y la Guardia Nacional, en coordinación con autoridades locales.
Como parte del operativo, se activó un plan integral que incluye más de 1,500 elementos en patrullajes mixtos, así como el uso de drones, operativos pie tierra y puntos de revisión. Además, se instalarán nuevas cámaras de videovigilancia en zonas estratégicas de la ciudad, conectadas a un sistema de monitoreo en tiempo real.
El objetivo, según se anunció, es frenar delitos de alto impacto, restaurar la confianza ciudadana y recuperar el control de zonas que han sido afectadas por grupos delictivos. La estrategia incluye también la depuración interna de la policía municipal y la implementación de nuevos canales de denuncia ciudadana.
La población espera resultados concretos ante el clima de violencia que se ha recrudecido en los últimos meses.
