ESTADOS UNIDOS.- En medio de su ofensiva contra migrantes en Los Ángeles y otras ciudades, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que “vienen cambios” en relación con los trabajadores migrantes agrícolas y de la industria de la hospitalidad, sectores que dependen en gran medida de la mano de obra indocumentada en Estados Unidos.
“Nuestros agricultores y la gente del sector hotelero y de ocio han estado afirmando que nuestra agresiva política migratoria les está quitando excelentes trabajadores con amplia experiencia, y que esos empleos son casi imposibles de reemplazar”, dijo Trump en su red Truth Social.
“En muchos casos, los delincuentes a los que se les permitió entrar a nuestro país gracias a la absurda política de fronteras abiertas de Biden están solicitando esos empleos. Esto no es bueno. Debemos proteger a nuestros agricultores, pero sacar a los delincuentes de Estados Unidos ¡Vienen cambios!”, remató.
Brooke Rollins, la secretaria de Agricultura, dijo que todas las opciones están siendo consideradas en relación con esos trabajadores. “El presidente entiende que no podemos alimentar a nuestra nación ni al mundo sin esa fuerza laboral, y está escuchando a los agricultores al respecto”, aseguró a la cadena CNBC.
¿Cuántos trabajadores indocumentados trabajan en el sector agrícola en EU?
Los trabajadores indocumentados, la mayoría nacidos en México, constituyen una porción considerable de la fuerza laboral agrícola. Aunque no existen cifras oficiales, estimaciones independientes calculan que 45% de los trabajadores agrícolas de Estados Unidos, aproximadamente 950 mil de 2.2 millones, son migrantes no autorizados.
Algunos informes sugieren que 70% de la mano de obra en las granjas lecheras de Wisconsin es realizada por indocumentados, y casi 75% de los trabajadores agrícolas de California son indocumentados. Los empleadores reconocen que es un tipo de trabajo intensivo al que no aplican trabajadores estadounidenses.
En el sector de la hospitalidad se estima que alrededor de 7.1% de la fuerza laboral es indocumentada, equivalente a más de un millón de trabajadores.
Aunque los demócratas han propuesto en los últimos años una serie de iniciativas de ley para regularizar a la fuerza laboral indocumentada agrícola, así como a los beneficiarios de la Ley de Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), las propuestas han sido rechazadas por la mayoría de los republicanos en la Cámara de Representantes y en el Senado.