CIUDAD DE MÉXICO.- La Secretaría de Salud informa que, como parte de la construcción de una República Sana, se alcanzó un acuerdo integral entre el Gobierno de México, el Congreso de la Unión y representantes del sector empresarial, para que el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) se mantenga en 3.8 pesos por litro para bebidas con azúcar y en 1.5 pesos por litro para las endulzadas con edulcorantes.
El anuncio se realizó durante la conferencia encabezada por el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, diputado Ricardo Monreal Ávila, con la participación del secretario de Salud, David Kershenobich; el subsecretario de Integración Sectorial y Coordinación de Servicios de Atención Médica, Eduardo Clark García Dobarganes; el presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, diputado Carol Antonio Altamirano; en representación del sector empresarial y de la Asociación Mexicana de Bebidas, Andrés Massieu Fernández, y el representante de Coca-Cola México, Patricio Caso Prado.
El secretario de Salud, David Kershenobich, resaltó que el acuerdo forma parte de una estrategia más amplia para reducir el consumo de alimentos ultraprocesados y fomentar el desarrollo de alimentos funcionales, esto sin afectar la estabilidad del sector productivo.
“Este acuerdo refleja el compromiso del Gobierno de México con la salud preventiva y con la construcción de una República Sana. No es una medida recaudatoria, sino educativa y transformadora, que promueve hábitos saludables desde la infancia y fortalece la corresponsabilidad entre gobierno, industria y sociedad”, afirmó.
El subsecretario Eduardo Clark explicó que la medida busca enfrentar la crisis cardiometabólica que atraviesa el país. Detalló que México ocupa el primer lugar mundial en consumo de refrescos, con 166 litros por persona al año, y que el nuevo IEPS —de 3.08 pesos por litro para bebidas con azúcar y 1.5 pesos por litro para las endulzadas con edulcorantes— contribuirá a reducir su consumo, fomentar la reformulación de productos y promover opciones más saludables.
Añadió que el acuerdo con la industria incluye compromisos voluntarios, como disminuir el contenido de azúcar y calorías, eliminar la publicidad dirigida a menores de edad, impulsar presentaciones más pequeñas y favorecer precios y promoción a productos sin azúcar. “El IEPS se convierte en una herramienta de salud pública. Su fin no es recaudar, sino salvar vidas y construir un país más sano”, afirmó.
En representación del sector empresarial, Andrés Massieu Fernández, de la Asociación Mexicana de Bebidas (MexBeb), reconoció la apertura del Gobierno y del Poder Legislativo. “Compartimos la preocupación por el sobrepeso y la obesidad. Es un problema complejo que requiere corresponsabilidad. Fortaleceremos la innovación, reformulación y autorregulación publicitaria para orientar al consumidor hacia mejores opciones”, señaló.
Por su parte, Patricio Caso Prado, representante de Coca-Cola México, anunció compromisos concretos del sistema Coca-Cola. “Reduciremos 30 por ciento las calorías de Coca-Cola regular, impulsaremos que las versiones sin azúcar sean más accesibles y eliminaremos la publicidad dirigida a menores de 16 años”, informó.
Añadió que se establecerá una mesa de trabajo permanente con la Secretaría de Salud para dar seguimiento a los avances.
El senador Ricardo Monreal Ávila destacó la relevancia del acuerdo y su impacto internacional: “Este arreglo es innovador y ejemplar. Pocos países han logrado colocar la salud pública por encima de los intereses recaudatorios. El diálogo y la buena fe fortalecen las políticas públicas en beneficio del país”, expresó.
La Secretaría de Salud expresó su agradecimiento al Congreso de la Unión, en especial al diputado Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política, y al diputado Carol Antonio Altamirano, presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, por su acompañamiento, apertura y disposición al diálogo para concretar acuerdos que fortalecen la salud pública y promueven el bienestar social.
Asimismo, reconoció la colaboración del sector productivo, particularmente de las empresas que participaron en el proceso de negociación, por su compromiso con la salud y su disposición a asumir una responsabilidad compartida en la construcción de un entorno alimentario más saludable.
El acto concluyó con un reconocimiento conjunto a las empresas participantes —Coca-Cola México, Coca-Cola Femsa, Arca Continental, Jugos del Valle–Santa Clara, GBT y la Asociación Mexicana de Bebidas— por su contribución a una transformación histórica que coloca la salud de las y los mexicanos en el centro de la agenda nacional.
El Gobierno de México reitera que la prevención, la educación y la corresponsabilidad social son pilares de su política de salud. Este acuerdo representa un paso decisivo dentro de la estrategia nacional para reducir el consumo de productos ultraprocesados, impulsar el desarrollo de alimentos funcionales y avanzar hacia una República Sana, con una población más activa, informada y saludable.