ESTADOS UNIDOS.- La bóveda celeste ofrecerá un espectáculo sin precedentes en los últimos meses de 2025. Dos cometas —C/2025 R2 SWAN y C/2025 A6 Lemmon— se acercarán a la Tierra y podrán observarse a simple vista, prometiendo un cierre de año inolvidable para astrónomos y aficionados al espacio.
El cometa SWAN, descubierto recientemente, será uno de los protagonistas del evento. Sin embargo, la verdadera joya cósmica será el cometa Lemmon, un cuerpo helado que no volverá a visitar nuestro planeta en al menos un milenio. Ambos serán visibles entre octubre y noviembre, con el Lemmon alcanzando su punto máximo de brillo hacia finales de octubre.
Un visitante milenario desde los confines del sistema solar
El cometa C/2025 A6 Lemmon fue detectado el 3 de enero de 2025 por el astrónomo Carson Fuls en el observatorio Mount Lemmon, en Arizona (EE.UU.), como parte del proyecto Catalina Sky Survey, dedicado a la búsqueda de objetos cercanos a la Tierra.
Como muchos cometas, el Lemmon podría exhibir tonalidades verde-azuladas producto de la desintegración de moléculas como el cianógeno (CN) y el carbono diatómico (C₂) al interactuar con la radiación solar. Esta reacción genera una brillante coma —una nube de gas y polvo que rodea su núcleo— y una cola que podría extenderse varios grados en el firmamento.
A diferencia de los cometas de corto periodo, como el famoso Halley, el Lemmon tiene una órbita de aproximadamente 1,350 años, lo que convierte su paso por la Tierra en un acontecimiento verdaderamente único.
Fechas y puntos clave de observación
El cometa Lemmon alcanzará su máxima cercanía a la Tierra el 21 de octubre, situándose a unos 101 millones de kilómetros de distancia. Durante esos días se ubicará en la constelación de Boyero, cerca de la brillante estrella Arturo, lo que facilitará su localización.
Se espera que el cometa llegue a su perihelio (punto más cercano al Sol) el 8 de noviembre, cuando podría alcanzar su máximo brillo, visible incluso sin telescopio en cielos oscuros.
Calendario de observación:
10 de octubre: comienza a ser visible tras el atardecer.
21 de octubre: se aproxima a la Tierra.
31 de octubre: alcanza su brillo máximo.
8 de noviembre: pasa junto al Sol.
10 de noviembre: comienza a desvanecerse gradualmente.
Los astrónomos estiman que su magnitud visual podría rondar entre 4 y 5, lo que lo haría tan brillante como una estrella tenue, perceptible a simple vista desde zonas rurales o libres de contaminación lumínica.
Dónde y cómo observarlo desde México
El cometa será visible desde el Hemisferio Norte, incluyendo México, Centroamérica y España, siempre que las condiciones atmosféricas lo permitan. Para disfrutar de este evento, los especialistas recomiendan:
Buscar un cielo oscuro: alejarse de las luces urbanas mejora notablemente la visibilidad.
Revisar el clima: elegir noches despejadas y, si es posible, sin Luna.
Observar después del atardecer: el momento ideal es cuando el cielo comienza a oscurecer y aparecen las primeras estrellas.
Para ubicar el cometa, se sugiere identificar primero la Osa Mayor en el noroeste y trazar una línea hacia Arturo, en la constelación de Boyero. El Lemmon se encontrará cerca de esa región.
Además, aplicaciones como Stellarium, SkySafari, Star Walk 2 o Heavens-Above permitirán seguir su trayectoria en tiempo real según la ubicación del observador.
Un espectáculo para las generaciones presentes
El paso del cometa Lemmon será una oportunidad única para contemplar un visitante milenario procedente de las profundidades del sistema solar. Su brillante estela, visible a simple vista, promete convertir las noches de octubre y noviembre en un recordatorio de la inmensidad y belleza del universo.


