TEHERÁN.- Ante las intensas amenazas procedentes de Israel y Estados Unidos, el líder supremo de Irán, ayatolá Alí Jameneí, se habría refugiado en un búnker subterráneo y designado tres clérigos como posibles sucesores, informó The New York Times citando a tres funcionarios iraníes cercanos a la estructura de poder .
Según el reporte, Jameneí también estableció una línea de reemplazo en altos mandos militares, para asegurar continuidad si más oficiales sobresalientes fueran atacados. Además, ha eliminado las comunicaciones electrónicas de su entorno y solo se comunica a través de un colaborador de máxima confianza .
La medida refleja el temor a un posible ataque dirigido específicamente a su persona: ni su hijo Mojtaba Jameneí, ni el fallecido expresidente Ebrahim Raisi fueron incluidos entre los aspirantes, rompiendo con la idea de una sucesión dinástica y dando paso a una selección institucional a cargo de la Asamblea de Expertos, con la instrucción de agilizar ese proceso en caso de su muerte.
Este paso subraya la elevada tensión política en Irán durante el conflicto vigente en Medio Oriente, y la percepción de que su figura podría ser un objetivo clave. El sistema de control interno permanece funcional, sin signos de fisura.
