En lo que va de este 2025, México enfrenta un aumento alarmante en picaduras de araña violinista (Loxosceles), con un total de más de 950 casos reportados entre enero y abril —un incremento del 30 % respecto al 2024—
De acuerdo con el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), los cinco estados con mayor incidencia de picaduras son Jalisco, Nuevo León, Ciudad de México, Estado de México y Puebla, seguidos por Morelos y Tamaulipas, concentrando juntos alrededor del 75 % de los casos.
En Jalisco se registraron 26 casos, en Chihuahua 14, en Guanajuato y Puebla 13 cada uno, en Morelos 12 —y en Querétaro y Zacatecas 10 cada uno; el Edomex reportó 8, mientras que la CDMX tuvo 6 casos.
En Oaxaca, las autoridades estatales confirmaron 5 picaduras al 2025, en comparación con solo uno en el mismo periodo del año anterior

Otros estados del sureste como Campeche, Nayarit, Quintana Roo y Tabasco no han reportado casos durante este periodo
El comportamiento de la araña violinista es más activo con el calor y la humedad, especialmente entre mayo y julio. Su veneno es dermonecrótico y puede provocar desde ampollas y necrosis hasta síntomas sistémicos como fiebre, náuseas, vómitos, y en casos severos, afectaciones renales. La infestación urbana, con la expansión de viviendas, y el regreso a espacios cerrados tras el invierno han aumentado el contacto con estos arácnidos.
Las claves para prevenir la mordedura incluyen mantener limpios los espacios oscuros y poco usados, como armarios y closets; sacudir la ropa, sábanas y zapatos antes de usarlos; cerrar rendijas en muros y techos; y utilizar guantes al manipular objetos guardados. Ante la sospecha de picadura, se recomienda acudir de inmediato a un centro médico que cuente con antídoto, ya que no siempre está disponible y el tratamiento oportuno puede evitar complicaciones graves .